Como cada día laborable, me levanto, me levanto sí, demasiado pronto; y no, no me despierto, he dicho levanto, el despertar siempre llega después de unas cuantas dosis de cafeína, por cierto malísima para el organismo, pero imprescindible para que mis ojos sean capaces de procesar imágenes y las envíen en condiciones a mi cerebro.
Duchas, desayunos, mochilas, adolescencia argggg!…
- ¡Mamá no tengo ropa!
(Si es que con 20 pantalones y más de 30 camisetas uno no puede vestirse)
- ¡Mamá yo no puedo salir así!
(Fijo que con el escote que lleva, en cuanto salga de casa para el tráfico)
- ¡Mamá la camiseta que puse a lavar! (hace 8 horas) ¿aún no esta limpia, planchada, doblada y a punto para ponérmela?
(¡Dios! Es que es una vergüenza cómo está el servicio, leche)
Pues eso que - ¡Buenos días! - JA!
Nada que sobrepasada la primera hora de la mañana, llego a la estación de tren intentando pensar, ¿te dejas algo?, ¿has dejado al niño en casa o en el cole?, ¿la adolescente está en clase?, ¿en clase?, bueno dejemos eso para más tarde.
En fin que a primera vista parece que todo el mundo está donde debe estar.
Llega el tren, me toca correr, dichosos tacones (si es que llegas a una edad, te dicen que los tacones suben el trasero y no te los quitas ni para ir a hacer footing) fijo que hoy me pasará factura la espalda.
Por fin dentro del vagón (a alguno no le dio tiempo ducharse ¡puaf!)
Me pongo los cascos - ¡Batería baja, batería baja, OFF! Me cagüen…
Si es que prefiero que los jóvenes sean maleducados, – ¿Señora quiere sentarse? ¡Si y tu puñetera madre también!!! Déjate de tonterías mejor te sientas, estos tacones te están matando.
Vaya, el periódico gratuito no me dio tiempo a pillarlo. El caballero que está sentado a mi derecha está leyendo la Vanguardia.
No nos damos cuenta pero está claro que no nos gusta que alguien comparta nuestra lectura, porque a la que disimuladamente intento releer algún titular, él va cerrando cada vez más el periódico…, si es somos de un solidario, ja ja ja!!!
jajaja, buenísimo ya sabes que me encantan tus monólogos, si es que cambias de registro como si nada, estupendo empezar este día con una carcajada. Dios!! vivo reflejo de la vida misma. Muaks. ITA
ResponderEliminarJe,je,je realmente hay un dicho que le va que ni pintado !!! Nada es verdad ni es mentira, todo es según el color del cristal con que se mira... Ahí va eso, y además cómo no, va de colores. Besos cariño.
EliminarMolt bo, m has fet sonriure !!!
ResponderEliminarComo la vida misma!!! Més d'una hi pensem de bon dematí... ja ja ja Petons guapa
EliminarM'encanta!!! Es boníssimmmmmmm!!!!!! Estàs per anar al Club de la Comedia.....super divertit i real como la vida misma!!!
ResponderEliminarPetonarrossssss enormessss guapa!!!
Montse
Mmmmmm, crec que les payasses les posen de públic, je je je
EliminarPetons